martes, 9 de junio de 2009

Procesos judiciales importantes que sientan precedentes. Demandas a petroleras.


Shell acusado de vulnerar los Derechos Humanos
El gigante petrolero pagará por no ir a juicio.

La cadena de gasolineras Shell fue acusada en la década de los noventa de apoyar las violaciones de los Derechos Humanos en Níger. Entre otros delitos, se les vinculaba con la muerte en 1995 del activista medioambiental Ken Sar Wiwa y de otros ocho opositores al Gobierno militar.

Al parecer, las disputas que acabaron en represión y asesinato, comenzaron como una manifestación de denuncia hacia la compañía en Nigeria.

Tras más de una década de litigios que incluso fueron trasladados al Tribunal de Distrito de Manhattan, el gigante del petróleo Royal Dutch Shell, ha acordado el pago de una indemnización de 15,5 millones de dólares que le eximirá de un juicio por presunta violación de los Derechos Humanos.


Paul Hoffman, abogado de las víctimas, explicó que 5 de esos millones de dólares irán a parar a un fondo a favor del pueblo ogoni, indígena del Delta del Níger, mientras que el resto del dinero servirá para abonar los costes de los abogados y compensar directamente a las familias afectadas.

Malcom Briended, director ejecutivo de Shell, repitió ayer que "las alegaciones eran falsas". Aunque, expresando el deseo de la compañía, declaró que, aunque su objetivo era limpiar su nombre, “creemos que la forma correcta de seguir adelante es centrarnos en el futuro del pueblo ogoni, importante para la paz y la estabilidad y la región".

De esta forma, Shell reconoce que, "aunque no tomó parte de la violencia ocurrida", sí admite que "los demandantes y otras personas sufrieron" como consecuencia de la represión.

http://www.rioja2.com/diario/43912-702-18-Shell_acusado_de_vulnerar_los_Derechos_Humanos

Se acerca descenlace de proceso contra Texaco

Si Ana Ruiz oye mencionar el nombre del gigante petrolero Chevron empieza a temblar de ira. En su casa de madera en la selva, donde las llamas de los complejos petroleros iluminan el cielo, ella señala un retrato de un hijo, que murió de leucemia hace siete años, a los 16.














“Los petroleros estadounidenses crearon la contaminación que mató a mi hijo”, reclama Ruiz, de 58 años, que vive en un claro donde Texaco, la petrolera que Chevron adquirió en 2001, solía verter desperdicios en fosas usadas, décadas antes, para perforar sus pozos.

Los obreros de Texaco se marcharon hace ya mucho tiempo, pero la sustancia negra, densa y grasosa de los fosos se filtra en las capas superiores del suelo allí y en docenas de otros lugares de la selva nororiental.

Últimamente, los únicos empleados de Chevron que visitan los que fueron yacimientos petrolíferos, en una región donde abunda el resentimiento hacia la compañía, lo hacen escoltados por guardaespaldas.

Ellos representan una de las partes en una amarga lucha que está llegando a ser la mayor querella ambiental del mundo, con 27 mil millones de dólares en daños potenciales.

Chevron se prepara para el fallo de un solo juez, en un diminuto juzgado, en el piso superior de un centro comercial en Lago Agrio.

La simpatía del juez, un oficial del Ejército retirado, llamado Juan Núñez, no son difíciles de discernir y parece probable que falle contra Chevron este año. “Se trata de una lucha entre Goliat y gente que ni siquiera puede pagar sus cuentas”, dice Núñez, de 57 años, en su oficina, donde hay apiladas hasta el techo más de 100.000 páginas de evidencias.

Sin embargo, no es probable que su fallo ponga fin al caso. De hecho, la discusión ya es motivo de intenso cabildeo en Washington, que podría ejercer presión sobre Ecuador en defensa de Chevron. Si pierde la compañía, está lista para buscar apelaciones y, si es necesario, un arbitraje internacional.

Texaco estableció intereses en el país en los sesenta y para cuando estaba preparada para marcharse, a comienzos de los noventa, hacía falta una limpieza de sus operaciones.


Es así que Texaco llegó a un acuerdo por 40 millones de dólares con Ecuador para limpiar una parte de las fosas de desperdicios en su sector de concesiones, absolviéndola de responsabilidad futura.

Esa limpieza, realizada en los noventa, quedó lejos del nivel que Texaco habría esperado alcanzar y los pobladores ecuador quedaron convencidos que estaban enfermando debido a la contaminación que dejó atrás.

Por ello entablaron una demanda legal en Estados Unidos en 1993 y posteriormente alegaron que el acuerdo con Texaco no cubría sus agravios.

Al final, se desestimó la demanda estadounidense con el argumento de que el caso debía juzgarse en Ecuador.

Actualmente, Chevron absorbió a Texaco, al tiempo que Ecuador pasó por una metamorfosis bajo el presidente de izquierda, Rafael Correa, quien se ha puesto del lado de los querellantes en repetidas ocasiones, refiriéndose al pasado de Chevron como “un crimen en contra de la Humanidad”.

Citando estudios científicos, los querellantes alegan que químicos tóxicos, incluido benceno, que induce la leucemia, de las fosas de desperdicio de Texaco, se han filtrado por décadas al suelo, mantos subterráneos y arroyos.

Pero la demanda se centra más en una limpieza ambiental que en las muertes por cáncer.

Más de cuatro décadas después, la evidencia de la contaminación es ineludible en sitios cercanos a Lago Agrio y otros poblados de la región.
Algunos estanques de desperdicios excavados por Texaco, que combinan lodo nocivo de la perforación y petróleo crudo, aún yacen expuestos bajo el sol, filtrándose hasta sistemas acuíferos en la cercanía.

En lo que pudiera ser la parte más contenciosa de la batalla legal, Chevron argumenta que no la pueden responsabilizar por los daños ocasionados por Petroecuador después de que la petrolera ecuatoriana asumió el control del sitio, o por el proyecto ecuatoriano orientado a la colonización de su frontera selvática, lo cual atrajo a más de 40.000 colonos a la región para los años setenta, que usaron caminos que construyó Texaco.


Los querellantes alegan que Chevron debe ser considerada responsable del daño en el sitio donde Texaco solía operar, hasta el presente, alegando que los sistemas que usó Texaco permitieron que Petroecuador siguiera contaminando.

A pesar de la magnitud potencial de los daños, Chevron insiste en que no está en juego su solvencia. Sin embargo, la batalla legal está haciendo mella en su imagen ambientalista.

Mientras transcurre el litigio, ajeno a los trámites judiciales, José Guamán, de 62 años, quien enviudó hace años, aún transita por zonas cercanas a los viejos campamentos. Dice que no sabe qué causó la muerte de su esposa, de quien recuerda cayó a un pozo de desperdicios. “Pero, si algo sé, es que el petróleo maldice a cualquiera que lo toque y si eso se aplica a nosotros, entonces también debería aplicarse a los estadounidenses”.

Detalles

Sugerencia
Steven Donziger, uno de los abogados de los querellantes, dice que Chevron debería demandar a la compañía Petroecuador si sostiene que la contaminación se ha dado después de que Texaco dejó de operar.


Desechada
Un juez en California desechó otra demanda en contra de Chevron por muertes a causa del cáncer en el 2007, por encontrar que el abogado del querellante, Cristóbal Bonifaz, había expuesto alegatos falsos.

Versión
La Procuraduría General de Ecuador acusó el año pasado a dos abogados de la empresa Chevron de conspirar fraudulentamente para probar que Texaco había limpiado los pozos de desperdicios.

http://www.eluniverso.com/2009/05/24/1/1447/9FFABAD146984E66A31B03F8ABFF10F3.html

1 comentario:

Forjador Boricua dijo...

Cuando los pueblos nos demos cuenta, que nuestros vecinos se comen la fruta y a nosotros nos da la dentera, entenderemos que lo que afecta a un hermano nos afecta a todos, en el pueblo de Naguabo al este de la Isla, una compa ... Leer másñia le ofrecio hace años trabajo a casi todo el pueblo, el gobierno y el munidcipio apoyo a la empresa y se hizo de la vista larga de sus crimenes ambientales, esta compañia tenia un contrato con el Departamento de la Defenza, para desarrollar armas quimicas(agente naranja, amtrax, napalm, etc)años despues abandonaron el pueblo, dejaron la tierra y la playa contaminada con mercurio y plomo, y 30 años despues todavia el mar esta lleno de contaminacion, si pasan y ven el balneario abandonado, es que esa playa esta totalmente contaminada, la supuesta bendicion de ofrecer trabajo termino con la maldicion de ver a sus hijos y nietos enfermos y su pueblo desolado, sin conseguir empresas que se arriesguen a invertir en esa zona... La CORCO en Guayanilla, la SHELL en Cata ... Leer másño, la Marina de guerra en Vieques, Culebra y Ceiba(si Roosvelt Roads esta totalmente contaminado yo pescaba en Isla Piñero cuando hacian practicas de bala corta en ese lugar)la PR Kriogenic en Bo Palmas y su lago de contaminante, que simplememte lanzaron detras de la compañia, sin importarle que detras habian hecho una Urb, las fabricas que estan desde Manati hasta Barceloneta, usando los acuiferos del Norte para desechar sobrantes, etc, son solo unos pocos casos, en cada pueblo la dejades de las autoridades y la ignorancia de muchos de los afectados, a causado que nuestra pequeña isla sea una bomba de tiempo, digamos BASTA YA!!! y no permitamos mas abuso, hoy son los del Caño de Martin Peña, mañana podemos ser nosotros... UN VIEJO LOBO