martes, 3 de mayo de 2011

Tras la fachada de Puerto Rico: los vicios estructurales y las grietas de la democracia


Una pesadilla puede ser una serie de imágenes que destrozan la paz de un cuerpo que si lo miras desde cierta distancia aparenta dormir placenteramente. Sobresaltos y bruscos movimientos tal vez acompañados de un grito inesperado de dolor o angustia, sudoraciones y hasta un brinco sorpresivo son señales de que la tranquilidad del cuerpo no es real y que el supuesto reposo es falso. Si nos contentamos con mirar desde la distancia el cuerpo y que nuestra mirada sea fugaz, el conflicto puede pasar desapercibido. Sostengo que similar situación sucede con el cuerpo político de un pueblo como el nuestro, a la lejanía puede parecer que yace en ese estado de paz y tranquilidad acostado en sus verdores y arropado por sus mares, pero la observación detallada revela esos choques, giros y tumbos que produce una pesadilla que se esconde tras la superficialidad.


Tanto de nuestra igualdad de derechos es solo una ilusión, un espejismo.

Las promesas de nuestros derechos fundamentales como ciudadanos desaparecen una vez te adentras tras la fachada constitucional. Es desconcertante que luego de ver los jardines que adornan La Fortaleza en la ciudad amurallada donde nuestro estilizado gobernador logra impartir una imágen de dignatario caminas, urge solo unos pasos, para encontrarte a cientos de ciudadanos marchando en las calles aledañas peticionando ser escuchados y notificados de decisiones municipales que atentan directamente contra sus negocios y vidas. Piden solamente ser notificados y escuchados, reciben frías respuestas negativas de oídos sordos. A pasos de la fachada de La Fortaleza que simboliza un gobierno electo por el pueblo y para el pueblo la ausencia de actitudes democráticas hace gala de su autoritarismo principesco.

Seguimos el recorrido. Justo a unas calles queda en una esquina el elegante edificio del Departamento del Estado, otra fachada arquitectónica inevitable que resguarda a un funcionario ministerial que hace alardes de calistenias mentales para alegar que el día antes una actividad en la que bajo la lluvia se han reunido decenas de miles de personas a manifestarse (realidad que ha quedado retratado extensamente en fotografías, vídeos y testimonios) no es de la magnitud que es indiscutible. La democracia nuevamente padece cuando las realidades tienen que ceder su lugar a las diatribas partidistas. El dicho de tapar el cielo con la mano no procede en el discurso del Secretario que cual el mejor actor shakespeariano no vacila en emitir un monólogo producto de un libreto ensayado para estas ocasiones en que hay que alejarse de la realidad.

Ayer en diferentes puntos hermosos de la ciudad se han reunido un grupo de personas a escuchar testimonio tras testimonio de agresiones, violaciones de derechos fundamentales, usurpadas capacidades democráticas de ciudadanos, testimonio tras testimonio de ciudadanos golpeados, arrestados ilegalmente, maltratados, criminalizados por hacer uso de los dones que expresa el documento constitucional que parece haber sido apresado en su bóveda de cristal en el edificio de la legislatura. El histórico pliego duerme con pesadillas que narran cientos sino miles de ciudadanos cuyo delito ha sido tratar de expresar su inconformidad, cuyos crímenes son creer que tienen el poder de ser escuchados por sus representantes gubernamentales y que son castigados hasta violentamente por esos policías que juran velar por su seguridad y son castigados por atreverse a dudar, por atreverse a usar su voz, por atreverse a atreverse.

Los hechos que yacen tras esa fachada de la democracia son la realidad del pueblo que tiene un municipio sin nombrar de más de veinte mil presos, que vive su peor cuadro de violencia y delincuencia que amontona cadáveres a razón de al menos tres por día en cifras que superan los países más atribulados del hemisferio y son cifras que sobrepasan países en los que se libran conflictos armados. Y escandaliza que las cifras de criminalidad descubrimos son alteradas, no son fieles, solo podemos confiar en la cantidad de muertos porque como muertos al fin hay que reconocer su existencia antes que empiecen a descomponerse, pero los robos se pueden tapar, las agresiones se pueden olvidar, los niños abandonados y abusados se pueden esconder, las mujeres agredidas y explotadas crónicamente se pueden disimular con canciones y campañas publicitarias. La democracia agoniza cuando la cotidianidad de nuestros errores se maquilla con disimulos y excusas de paso.

Las formas en esta estética de nuestros contornos sociales no obedece a la sustancia. El barro se convierte en plasticina.

El dibujo que se refleja de una sociedad de oportunidades, de puertas abiertas, de escalinatas que conducen a elevar los niveles de vida de cualquiera y de todos es una maqueta que se ha distorsionado, sus proporciones violentadas, sus ángulos y desniveles enloquecidos. Los planos fundamentales de las comunidades que cosechan su destino sembrando avenidas educativas, erigiendo plazas donde los hombres y las mujeres puedan aportar en igualdad al bienestar de la vecindad fueron olvidados en la obra diaria. Todos estos esbozos de estas columnas principales de nuestros sueños como cultura parecen ser meros artificios, decoraciones y accesorios que no funcionan. Ventanas que no abren, paisajes que disimulan paredes vetustas y puertas cerradas con temibles candados cuyas llaves se han oxidado.

Contradicciones tales como que el derecho a votar se haya convertido en condena de obedientemente permanecer sordos y mudos por cuatro años entre cada festival de teatro electorero. Votaste ya, vete al cautiverio, agarra las cadenas de la sumisión y espera cuarenticuatro meses hasta la próxima cita que tienes con la libertad condicionada y de poco vuelo. Democracia, mis hijos e hijas, no es escuchar al pueblo, es jugar con sus momentáneas pasiones dos veces cada diez años, cinco veces cada veinte, y si vives una vida abundante, eres libre si acaso unas catorce veces en una existencia de sesenta y ocho años. ¿De qué te quejas..?


Mientras suda, padece y aprende a aplaudir como las focas en el fascinante zoológico abierto en el que somos dóciles animales domésticos intercambiables, relocalizables, desempleables y frustables que los encargados del circo nos dirán qué hacer y lo debemos hacer a expensas del látigo, de la privación de alimentos y el castigo. La democracia como espectáculo circense, donde hay grandes actos que desafían los peligros, payasos que hacen reir a niños tristes y acróbatas haciendo piruetas para no caerse ya que la red de la seguridad se ha eliminado para aumentar las emociones y las ganancias de los dueños de la carpa.

Pero y ¿qué de esos magos fascinantes con sus ropajes y capas que en sus actos sacan el conejo de la justicia de sombreros? y ¿qué de las misteriosas gitanas que nos dicen la fortuna cuando interpretan las leyes del universo..? ¿de qué te quejas..? Es asunto de tener imaginación y creer en la magia que tal vez el día menos pensado un unicornio aparezca en tu vida.

Tras la fachada de la democracia en Puerto Rico hay un pared erosionada por el tiempo y una ventana antigua...


6 comentarios:

Roberto Ortiz-Feliciano dijo...

Sobrepasamos las cinco mil firmas el sábado por la tarde, las seis mil firmas, el lunes a las 7.09 pm y las siete mil firmas, martes a las cuatro de la tarde, miércoles a las dos y cincuentiuno (2.51 pm) de la tarde más de 8.000 firmas y viernes 29 superamos las nueve mil firmas que suscriben el Manifiesto de Casa Pueblo. Hoy jueves 5 de mayo de 2011 a las 2.06pm se ha sobrepasado las diez mil firmas en un acto documentado que evidencia un respaldo masivo y contundente al rechazo al proyecto del gasoducto según propuesto por la AEE. En Puerto Rico esta campaña ha impuesto un récord de participaciones suscritas, todos y cualesquiera alegatos del gobierno sobre la opinión del pueblo han que dado desacreditadas e impugnadas. Los millones de dólares invertidos en una campaña publicitaria a su favor han sido millones de dólares en esfuerzos banales y desacreditados. Los manejos sospechosos y planteamientos dudosos de los representantes del proyecto han sido desenmascarados. El pueblo de Puerto Rico ha manifestado claramente su sentir al respecto y es evidente su desaprobación del proyecto del gasoducto... la gente sigue apareciendo, la ola de solidaridad sigue creciendo y hasta en la calle se siente y escucha: Juntos en Adjuntas... (05.05.11/ROF)

En materia de esfuerzos de firmas esta cantidad equivale a un 6% de lo que se estima es el verdadero respaldo existente (en otras palabras por cada 6 firmas se interpretan 100 personas).

Otra amenaza para el Karso dijo...

"...la Ley Núm. 292 de 21 de agosto de 1999, Ley para la Protección y Conservación de la Fisiografía Cársica de PR, conocida como la “Ley del Karso”. Dicha ordenanza, originada a partir del reconocimiento de “la importancia de la zona kársica en sus valores y funciones”, y “encaminada a atender la responsabilidad de velar por la continuidad de éstos ya que entiende la incapacidad de que puedan ser restaurados una vez interrumpidos sus procesos o destruidas sus condiciones”, prohíbe la “construcción de caminos, carreteras, u otras vías de acceso sin la autorización del Secretario [del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales] bajo las disposiciones de esta Ley”.

A simple vista podría parecer que dicha ley es muy clara y que conforme a sus disposiciones el expreso no encaja en sus alrededores. Sin embargo, el asunto no es tan simple. La Ley del Karso exigía que se efectuara un estudio para definir las áreas que, debido a su importancia y función geológica, hidrológica y ecosistémica, debían ser protegidas para conservarlas. Dicho estudio tenía que estar terminado en un plazo no mayor de dos años a partir de la fecha de aprobación de la ley. No obstante, el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales presentó el “Estudio del Karso” en septiembre de 2008, luego de que la organización Ciudadanos del Karso (CDK), radicara un mandamus en el 2002 para asegurar el cumplimiento de las responsabilidades de la Ley 292... Para proteger las zonas del Karso es necesario informarse sobre los proyectos de desarrollo urbano que atentan contra nuestro patrimonio ambiental, reflexionar sobre cuánto cuestan los beneficios a corto plazo y los daños irreversibles que implicarían a largo plazo, para así poder participar de forma responsable en aquellos espacios de participación ciudadana."

http://www.dialogodigital.com/index.php/Otra-amenaza-para-el-Karso.html

Lo que quedaba del Tribunal Supremo dijo...

Cuando Efraín Rivera Pérez dimitió al Tribunal Supremo en junio del año pasado, hizo mención en su carta de renuncia de una “situación ineludible” que tenía que atender, la cual era, según dijo, de su “única y absoluta responsabilidad” y que esto le impedía continuar sirviendo en el foro en el que solo estuvo diez años.

No explicó nunca cuál era esa situación “ineludible”.

Pero poco después se supo que no lo era tanto como para impedirle comenzar a prestar su prestigio como exjuez asociado del Supremo a quien pudiera pagarle, como pasó en octubre cuando se unió al pleito legal por una finca que enfrenta al abogado Ramón Cacho Pérez y su padre, Ramón Cacho Tossas, con Roberto Hatton Gotay, un terrateniente de Ponce, del lado de este último. O como cuando, un mes antes de esto, se convirtió en el monitor invisible de la Policía por sólo $150,000 anuales.

Todos los jueces salen del Supremo con una pensión que es el 100% de su último salario. Pero parece que eso no les basta, porque, además de Rivera Pérez, a José Andreu García también se le ha visto por ahí litigando ante jueces que no mucho tiempo atrás dependían de su soberana voluntad para estar en esta o en aquella sala.

Mientras, Baltasar Corrada del Río se ha dedicado al muchas veces resbaloso oficio del cabildeo, como lo hizo alguna vez a favor de los que quieren hacer hoteles de lujo en los terrenos del valiosísimo Corredor Ecológico del Noreste.

En estas actuaciones, por supuesto, no hay nada ilegal.

Mas, como todos sabemos, una viscosa atmósfera de suspicacia rodea a toda la institucionalidad en Puerto Rico y estas acciones no solo abonan a esto, sino que también contribuyen al marcado desprestigio que durante las pasadas décadas ha venido acumulando el Tribunal Supremo.

(sigue...)

Lo que quedaba del Tribunal Supremo dijo...

(desde anterior)
En el caso de estos exjueces, muchos se preguntan para qué, en medio de las tremendas dificultades económicas del Estado, les pagamos esas jugosas pensiones, si evidentemente siguen teniendo los medios y la disposición para seguir ganándose la vida como cualquier hijo de vecino. Y ya que tienen los medios y la disposición, muchos se preguntan también por qué ni uno ha dedicado un solo minuto, que se sepa, a defender a alguien que no pueda pagarle.

Pero el desprestigio del Tribunal Supremo va mucho más allá de esto. Viene, como sabemos, desde el tiempo en que los gobernadores perdieron el último vestigio de pudor y comenzaron a llenarlo de activistas políticos, como Rafael Hernández Colón, que nombró a dos exdirectores de sus campañas electorales, el ya mentado Andreu García y el actual juez presidente, Federico Hernández Denton.

El colmo ocurrió esta semana con la designación de Luis Estrella y Roberto Feliberti y la forma en que sus nombramientos fueron considerados. Sus designaciones fueron anunciadas a última hora el lunes y ya el miércoles en la tarde eran jueces confirmados.

No se le dio tiempo al País para que aquilatara el calibre de los nominados antes de que fueran amartillados en sus estrados, algo en verdad insólito cuando se considera que uno de ellos, Estrella, estará en el foro por 31 fríos y largos años, si es que resiste la monástica vida del tribunal, algo que no se sabe porque nunca ha sido juez.

(sigue...)

Lo que quedaba del Tribunal Supremo dijo...

(desde anterior)
La jueza del Tribunal Supremo de Estados Unidos, Sonia Sotomayor, fue designada en mayo de 2009 y confirmada en agosto, tres meses después. Durante ese tiempo, se analizó con microscopio cada aspecto de su vida, cada decisión que escribió, incluso lo que dijo en cada foro público en el que habló en su vida.

Acá, el proceso fue tan abrupto y tan atropellado que lo único que llegó a saberse del tal Luis Estrella es que fue una potente máquina de hacer dinero, pues, en el momento de su designación, sus empresas tenían contratos con el Senado y con múltiples municipios y agencias de gobierno ascendentes a $444,700 anuales.

Mientras tanto, el poco tiempo que hubo para indagar, políticos y periodistas lo usaron para preguntar si los nominados eran “liberales” o “conservadores”, como si quedara duda o importara, o si creían en el aborto y otros cuentos, como si hubieran olvidado que esos asuntos se deciden en el Supremo de Estados Unidos y acá tenemos que tragárnoslos nos guste o no.

El proceso fue, en fin, como si hubiera algo que no quisieran que se supiera antes de que fueran irremediablemente confirmados y, en el camino, se llevaron lo poco que hubiera podido quedarle de prestigio a una institución que, en los países que toman sus asuntos en serio, se le trata como a piedra preciosa.
Por Benjamín Torres Gotay / btorres@elnuevodia.com

http://www.elnuevodia.com/loquequedabadeltribunalsupremo-966703.html

Roberto Ortiz-Feliciano dijo...

El debate se extiende: ¿cuántos actos inconstitucionales han sido legitimados?, ¿cuántas 'ilegalidades' se legalizan a fuerza de intereses económicos y discrímenes..?, ¿cuán en claro perjuicio y menoscabo del bien público opera el sistema judicial?, ¿vivimos en una sociedad pos-constitucional, en una sociedad pos-legal..?, y luego ¿qué...???